Fungicida y bactericida preventivo de amplio espectro con sulfato de cobre y cal y que cuenta con certificado ecológico. Es probablemente uno de los fungicidas más antiguos del mundo (surgió a finales del siglo XIX) y su éxito le ha permitido perdurar hasta nuestros días.
Con una eficacia probada en el tratamiento de hongos de diferentes plantas y cultivos, cuenta con particularidades tan importantes como que puede soportar la lluvia, siempre que se haya llevado a cabo una correcta aplicación.
¿Qué es el Caldo Bordelés?
El caldo bordelés es el resultado de una mezcla que incluye sulfato de cobre y cal, que se utiliza como fungicida y bactericida preventivo y cuya eficacia está contrastada por varias generaciones.
Fue descubierto a finales del siglo XIX por P. Millarde, un jardinero y botánico francés. Usó este compuesto para proteger los viñedos de una enfermedad tan peligrosa como un hongo de moho. Toma su nombre del lugar de su creación: la ciudad de Burdeos.
¿Para qué sirve el sulfato de cobre como fungicida?
Su propósito principal es impedir la infección de las plantas. Usar sulfato de cobre como fungicida permite actuar contra los hongos que causan múltiples enfermedades e incluso prevenirlos. En comparación con otros productos de la misma acción, el cardo bordelés contiene calcio, lo que permite a los cultivos compensar su deficiencia, que a menudo se encuentra en suelos pobres.
Además del calcio, sus elementos activos son poco solubles y se depositan en las plantas en forma de pequeños cristales, protegiéndolas así durante mucho tiempo de los hongos y las plagas. La cal contenida en la mezcla atenúa el efecto agresivo del cobre en las plantas y ayuda a preservar los cultivos durante un largo período de tiempo.
Dosis de Caldo Bordelés Vallés
Caldo Bordelés Vallés es una de las referencias históricas en este producto. Permite una sencilla aplicación para cada cultivo y planta. Eso sí, requieren de un tratamiento y dosis específica.
Su ficha técnica especifica lo siguiente en función del tipo de planta, las enfermedades que trata, su dosis (expresada para un equivalente por cada 100 litros de agua) y el plazo de seguridad (días que deben esperarse después de haber hecho un tratamiento para consumir un fruto o una planta):
- Ajo: antracnosis, alternaria, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-900 g/hl. Plazo de seguridad: 3 días.
- Almendro: lepra, monilia, moteado, cribado y bacteriosis. Dosis de 600-900 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Avellano: monilia y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Berenjena: alternaria, antracnosis, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 3 días.
- Brócoli y coliflor: alternaria, antracnosis, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Cebolla: antracnosis, alternaria,, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-900 g/hl. Plazo de seguridad: 3 días.
- Chalota: antracnosis, alternaria,, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-900 g/hl. Plazo de seguridad: 3 días.
- Cítricos: bacteriosis, aguado, fomopsis, hongos endofitos, Dosis de 200 cc/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Cucurbitáceas: alternaria, antracnosis, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-750 g/hl. Plazo de seguridad: 3 días.
- Frutales de hueso: lepra o abolladura, monilia, moteado, perdigonada o cribado y bacteriosis, 600-1.000 g/hl
- Frutales de pepita: monilia, moteado y bacteriosis, 600-1.000 g/hl.
- Garbanzo: rabia, 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Granado: monilia, moteado, perdigonada o cribado y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Guisante verde: alternaria, antracnosis, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 3 días.
- Haba verde: alternaria, antracnosis, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 3 días
- Higuera: monilia, moteado y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Hortícolas de hoja: alternaria, antracnosis, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Judía verde: alternaria, antracnosis, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 3 días.
- Lúpulo: mildiu. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Nogal: monilia y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Olivar: repilo y tuberculosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Ornamentales leñosas: manchas foliares y roya. Dosis de 600-1.000 g/hl. Sin plazo de seguridad.
- Patata: mildiu. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Pistacho: alternaria y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
- Tomate: alternaria, antracnosis, mildiu y bacteriosis. Dosis de 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 3 días en tomate en invernadero, 10 días en tomate al aire libre.
- Vid: mildiu y bacteriosis, 600-1.000 g/hl. Plazo de seguridad: 15 días.
Por su mayor efectividad, se recomienda aplicarlo antes de la aparición de la enfermedad o en las primeras fases de la implantación del patógeno.
Usos específicos del Caldo Bordelés (sulfato de cobre + cal hidratada)
Conozcamos ahora cuál es el uso específico en distintos cultivos del caldo bordelés, por aplicación foliar:
Sulfato de cobre para tomates
Para cultivo de tomate, el sulfato de cobre que contiene este fungicida sirve para el control y prevención de enfermedades como antracnosis, mildiu, bacteriorisis y alternaria. La dosis de aplicación es de 600-1000 gramos por cada 100 litros de agua. Es decir, una dosis máxima de 1 kg por cada 100 litros de agua, o 10 gramos por cada litro.
Tiene un plazo de seguridad de 3 días para tomate de invernadero, y hasta 10 días para tomate cultivado al aire libre.
Caldo bordelés olivo
En lo que se refiere al cultivo de olivos, el sulfato cuprocálcico incide en el control de repilo y tuberculosis. Este producto tiene una especial relevancia para el olivar y por ello se realizan tratamientos en primavera, otoño y también después de la recolección.
La dosis de caldo bordelés para olivo es de 600-1000 gramos por cada 100 litros de agua (600-1000/100 hl). Tiene un plazo de seguridad de 15 días, de tal forma que a partir de este plazo podremos realizar la recolección.
En olivar es importante los tratamientos de cobre que consiguen quedarse firmemente en la hoja y presenten resistencia al lavado, por lo que el uso de esta solución mezcla de cobre y calcio es muy utilizada y da buenos resultados.
Sulfato de cobre para árboles frutales
Tanto para frutales de hueso (albaricoque, melocotonero, ciruelo, etc.) como frutales de pepita (manzana, peral, membrillero, etc.), el caldo bordelés se utiliza en aplicación foliar como preventivo o curativo de enfermedades como la bacteriosis, monilia, cribado, abolladura o lepra.
La dosis de tratamiento es igual que para los casos anteriores, 600-1000 g/100 L de agua, con una dosis de caldo recomendado de 1200 L.
Tanto en frutales de hueso como de pepita, no presenta plazo de seguridad ya que no están autorizados los tratamientos con fruto. Hay que tener especial precaución en estos casos porque el cobre puede resultar fitotóxico para algunas variedades de frutales.
El sulfato de cobre para viñas
El tratamiento más clásico para el que se conoce el Caldo Bordelés es el que se refiere a la vid. Funciona muy bien para combatir las enfermedades en la viña provocadas por una alta humedad, sobre todo en zonas con altas precipitaciones. El producto fungicida ofrece prevención para enfermedades como bacteriosis o para hongos como mildiu.
La dosis de aplicación es de 600-1000 gramos/100 litros de agua (entre 6 y 10 gramos por cada litro si tiene pocas parras), con un plazo de seguridad de 15 días.
Composición
Sulfato Cuprocálcico 20% p/p
Comprar Caldo Bordelés en Coluga
En nuestra tienda le ofrecemos la posibilidad de comprar caldo bordoles en envase de 500 gramos, que es el autorizado para el uso doméstico, por un precio excepcional. Si es usted profesional y requiere de cantidades mayores póngase en contacto con nosotros a través del formulario web.